El mercado del cuero (nada menos que la piel de un animal) ha acostumbrado a los consumidores a pensar en él como un producto casi industrial y altamante tecnificado, desnaturalizándolo para crear una estética ''natural artificiosa''.
En Surco, hemos decidido crear productos en cuero a partir de la crosta, un cuero semi procesado o ''de poco proceso'' que nos permite recodificar la estética a este material. Se trata de un cuero de baja intervención química con poco consumo de agua, recogido de la Tenería antes de la etapa final del proceso. Es un cuero que incluye ciertas ''imperfecciones'' -tales como líneas o marcas - que que son al mismo tiempo signos de un cuero de apariencia natural y una tactitildad única.
La falta de acabado en Tenería permite que el cuero sea poroso y pueda ser terminado en el taller de Surco a partir de un mezcla de ceras y aceites naturales que lo protegen del desgaste y la humedad.
Es importante que el consumidor sepa que todos los productos de Surco manufacturados con este tipo de cuero pueden presentar pequeñas líneas o marcas menores que, lejos de dañar su apariencia final, le otorgan una singularidad única.